¿Cómo se comporta el Homo sanjuaninus eroticus? Una mirada antropológica a este estereotipo telúrico

Robert Urbánovick, prestigioso antropólogo de la Sorbona, realizó una investigación sobre las tribus urbanas en nuestra provincia. Amigo de años, se hospedó en casa. Salía por las mañanas, conversaba con la gente, observaba. En su libro: “Los tribu-nales en San Juan” (Ed. Nowtilus), afirma: “Los tribu-nales sanjuaninos amalgaman dos esencias: tribus y profesionales. Son grupos de personas con un conjunto distintivo de comportamientos y creencias pero que no los hacen diferentes de la cultura dominante, sino parte de ella porque desarrollan actividades habituales para las que se han preparado como profesionales”. (Cap I: “Yo soy así” pág 13)

En agosto iré desplegando las informales charlas que teníamos. Esta es una:

-¿Cómo te fue, Robert?

-Me senté en un café. De pronto, apareció una mujer de buena presencia, llevaba tacos altos. Conté 5 bocinazos y frases como: “Mamita, te parto. Te chupo como un helado. Con esos tacos te pongo en cuatro patas”.

-¿La chica provocaba?

-No, Ale, para nada. La mujer estaba normalmente vestida. Eso me dio pie para determinar mi objeto de estudio: el comportamiento varonil sanjuanino en la calle.

-¿Qué descubriste?

-La calza, ese pantalón de lycra pegadiza que marca glúteos y pubis, los activa, sacándoles la represión, dando origen al homo sanjuaninus eroticus. Una nueva tribu-nal. He andado por muchos lugares, vivo viajando y estas actitudes en masa no sólo verbales sino gestuales, sólo las he visto aquí.

-¿Gestuales?

-Sí, Ale. En algunos casos, el homo sanjuaninus eroticus habla como rezando cuando pasa una mujer, se muerde el labio inferior, le mira los pechos y luego gira su cabeza para observar la cola.

-¿Esta tribu-nal tiene edad determinada?

-Ni edad, ni clase social. He visto a padres que profesionalizan a sus hijos en la Exteriorización Sexual Invasiva, el ESI.

-¿Qué diferencia hay con el piropo, Robert?

-La actitud. El piropo es un halago respetuoso: quien lo emite intenta hacer sentir bien al otro. El ESI es la cosificación del objeto deseado, en este caso, mujeres de cualquier edad. Me animo a decir que responde a rasgos psicopáticos.

-Aclarame, porfa.

-El psicópata confunde, divide y usa, generando en los demás: culpa, entre otras sensaciones. Cuando una mujer recibe un ESI, piensa confusamente: “Me tendría que haber vestido de otra manera” eso la divide para luego, ser permeable a que la usen.

-¿Cuáles serán las causas del comportamiento del homo sanjuaninus eroticus?

-Múltiples: una vida sexual desmotivada, deseos ocultos incumplidos, educación en paradigmas de pecado-castigo. Dice la sabiduría popular: “Dime de qué hablas y te diré de qué careces”.

-¿Y las mujeres, Robert?

-Esa es otra tribu-nal que dejaremos para la próxima charla.

Alejandra Araya