¿Para qué escribir literatura? ¿Para qué leerla? ¿Qué es un escritor? Le preguntamos a Luciano Melch

¿Qué leés? ¿Qué te gusta encontrar en un libro? ¿Qué esperás de un buen libro?

A- Leo novelas, poesía y textos pedagógicos (esto último viene a cuento de que estoy formando parte como colaborador de un “Taller de oralidad y escritura” en IMPA, que es una fábrica recuperada donde funciona un bachillerato y profesorado popular). No soy de leer diarios, aunque a veces a la fuerza por mi tarea en el bachillerato debo hacerlo. Volviendo a la pregunta, leí todo de Sábato, de Dolina, de Cortázar, algo de Bioy Casares, alguito de Borges -¡la Araya cuenta!-; de afuera a Hemingway, Whitman, Carver, Hesse, García Márquez. Del género poesía me gusta mucho el “realismo sucio” (Bucowski es mi preferido). Aunque también he indagado en Benedetti, Pizarnik, Fogwill, García Lorca, Storni, Bécquer,entre otros. Sin exagerar hay mil más que estoy dejando afuera. Soy bastante desprolijo y caótico a la hora de leer y puedo leer 5 libros a la vez.

1. ¿Para qué leer? (Qué le dirías a un pibe de 15, o de 18 que recién empieza la facultad, para qué tiene que leer?

Yo creo que la lectura implica una interacción y un esfuerzo que por ejemplo no exige el cine o el teatro. Uno “dialoga” con las imágenes que nosotros creamos –como lectores- de las palabras que otro escribió. Hay un trabajo hermoso al leer, que es como una gimnasia que en el camino mismo nos va dando placer. Por supuesto que hay algo de evasión, de búsqueda de sensaciones de otra realidad (leer es una droga sin efectos adversos). Creo que el “para qué” en mi caso es poder sumergirme en historias que abran puertas en la mente y en el corazón otras veces.

A alguien que recién empieza a leer le diría que lo haga para crecer. Que profundice en lo que más le gusta. A los que arrancan la fcultad, que no le tengan miedo a la extensión de los textos: lo importante es “desmalezar” los textos. No todo lo que se dice es importante. Hay muchas cuestiones de poder, de respuesa entre autores, etc que no aportan demasiado al verdadero sentido de los textos académicos. Hay mucha literatura al respecto. La astucia de poder ir al hueso de un texto lo da la misma práctica de la lectura. Que interpelen los textos, que los cuestionen, que sean un punto de partida, no un dogma. Paulo Freire en este sentido, es mi pedagogo preferido.

1. Estamos ante un cambio de paradigma, ya no leemos como leíamos hace 25 años atrás (sólo en papel). ¿Cómo leerán las nuevas generaciones (tus hijos, nietos)?

No estoy tan seguro de que estemos ante un cambio de paradigma si la pregunta apunta a un “reemplazo” de un paradigma de modo de lectura por otro. Es cierto que ya no leemos sólo en papel como en tiempos pasados (aunque no tan pasados). Creo que el papel sobrevivirá; no por una cuestión si se quiere romántica o nostálgica (en todo caso habrá que bajar costos de impresión, etc), sino porque en esa búsqueda que los lectores hace en la literatura, haya en el soporte papel un respiro frente a las pantallas. Quizás el papel se vea reemplazado definitivamente para cuestiones burocráticas o administrativas. No me animo a afirmar lo mismo en cuanto a la impresión de literatura. Es difícil saber qué sucederá en los próximos 10, 20 años. Lo que creo es que el papel va a convivir con el soporte digital en lo que respecta a libros de literatura. Me parece, por otra parte, que en las nuevas generaciones hay cierta tendencia hacia lo sintético.

1. ¿Qué es un escritor? ¿Qué tiene que hacer un artista para que vos lo considerés escritor? ¿Qué condimentos tiene que tener?

Un escritor es principalmente un artista. Pero un artista para ser escritor debe ser alguien que intervienga sobre la realidad desde su mundo y lo al mundo . La palabra para el escritor es lo que el pincel y las témperas son para el pintor. El escritor usa la palabra para tallar la realidad, para esculpir un mundo. O también se puede hacer una comparación entre el escribir y el cocinar como acto ritual. Se me ocurren palabras sueltas para describir a un escritor: LOCURA (de la buena ja!). INSPIRACIÓN. PASIÓN. ALGO-PARA-CONTAR. TRABAJO. IMAGINACIÓN. TRABAJO. SOLEDAD. PERSEVERANCIA. TRABAJO.

1. Decime tres temas que te obsesionen como escritor, aquellos que son recurrentes en tu escritura.

El amor, la muerte, la crítica a las construcciones y mandatos sociales (normas, prejucios, etc).

1. ¿Qué elementos tiene que tener un buen cuento?

Siguiendo los consejos de aquellos que saben mucho más que yo, creo que un buen cuento debe tener un inicio que enganche. Debe tener algo de “suspenso”: con suspenso quiero decir que se le dé algunas pistas al lector como guía en pequeñas dosis para que él termine la construcción. También creo que debe tener un buen final (no un final feliz, ¡eso es otra cosa!).

1. Por último: ¿cuál es tu sueño, tu anhelo en este oficio de escribir?

Mi sueño es poder vivir de lo que más me gusta: Escribir historias desde distintos géneros. La novela es mi gran desafío.